“No me quede yo para siempre en esta nada con barrotes que es la prisión de locos, donde mi madre y todos ustedes me han confinado, por haber tratado de ser Camille y mujer, Camille y artista, Camille y amante y libre.”
Con estas palabras, Laura Garmo le da voz a la gran escultora olvidada Camille Claudel. Su obra Perra Royendo hueso, también escrita y dirigida por la misma Laura Garmo, es un recordatorio de todas las mujeres olvidadas que se han quedado sin voz por culpa de una sociedad que incriminaba cualquier indicio de independencia intelectual o artística en una mujer.
Camille Claudel fue una prodigiosa escultora francesa a la que se la conoce por ser alumna y amante del escultor Auguste Rodin, y que, por el hecho de ser mujer, ha sido completamente eclipsada por su maestro, al que además, se le atribuyen muchas de las obras que ella hizo. Claudel, a causa de no ser reconocida como artista, acabó en la miseria, y su familia, considerándola una carga, la recluyó en un hospital psiquiátrico donde pasó los últimos 30 años de su vida.
Perra Royendo Hueso se desarrolla dentro de una habitación del hospital psiquiátrico de Montdevergues, donde Camille estuvo recluida. Como espectadores la acompañamos en un viaje por sus frustraciones, sus anhelos, sus recuerdos… Un viaje donde su protagonista nos dice todo lo que le gustaría decir si pudiera tener a alguien dispuesto a escuchar. Cuestiona el papel de la mujer dentro de la sociedad y en el arte, los estigmas hacia las enfermedades mentales, y la necesidad de aceptación que todos hemos sufrido en algún momento.
Laura Garmo nos muestra a Camille Claudel como una luchadora incansable, una mujer incomprendida que, a pesar de todo, no tuvo miedo a hacer lo que quería hacer, aunque le costara su propia vida. El texto de Garmo retrata su necesidad de ser escuchada de una manera desgarradora, pero con un aire cercano, teñido de nostalgia y con una sutileza que consigue que empaticemos con Claudel y la veamos, tanto en nosotras mismas, como en las mujeres que nos rodean.
La escenografía, diseñada por Lorena Rubiano y el vestuario, de Clara Echarren, junto con el diseño de sonido y de iluminación de Antonio Colomo, crean una propuesta estética muy acertada, que desde la sencillez, enmarca la obra en un ambiente frío y lúgubre. Es sorprendente la versatilidad de los cuatro elementos que vemos en escena, que nos permiten adentrarnos en la mente de Claudel a través de imágenes de una belleza sublime.
En cuanto a la interpretación, a pesar de la dificultad que supone interpretar un texto propio y autodirigirse, Laura Garmo retrata a Camille Claudel con una fragilidad y una fuerza, que por momentos es escalofriante, y a la vez nos transmite una ternura sobrecogedora.
Perra Royendo Hueso es una de esas obras necesarias, que se encuentran muy de vez en cuando. Ojalá Camille hubiera podido ver desde su habitación en Mondevergues el regalo que le iba a hacer Laura Garmo.
PERRA ROYENDO HUESO
Intérprete: Laura Garmo
Diseño de sonido e iluminación: Antonio Colomo
Escenografía: Lorena Rubiano
Vestuario: Clara Echarren
Ojo externo: Cora Ros y Nacho León
Texto y dirección: Laura Garmo
Producción: Colectivo Germen
Fotos: Kike Martos
Agradecimientos: Juan Miguel Alcarria, Pilar Valdelvira, Benigno Moreno, Sofía Cano y
Marta Martí.
EL UMBRAL DE PRIMAVERA. MADRID
Visto el 4 de noviembre de 2021
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