Etimológicamente la palabra democracia viene del griego, de "demos", lo que se puede traducir como "pueblo", y "krátos", lo que puede significar "gobierno". Es decir, gobierno del pueblo. Sobre si verdaderamente la democracia es o no el gobierno del pueblo puede girar parte de esta obra. Digo parte, porque sus intensas siete historias tienen muchas lecturas y puedes sacar infinidad de preguntas y de análisis.
Esteve Soler nos invita con su texto a pasear por historias que pueden parecer inconexas entre ellas pero quieren llevarte a un objetivo. Soler con maestría deambula por diferentes códigos y lenguajes para que algunas veces con risa, otras con incredulidad, otras con el corazón encogido, otras con dramatismo… te plantees qué es el mundo, cómo podría llegar a ser y que dejamos que sea.
Todo este sin fin de grandes cuestiones son hábilmente gestionadas por su director, Antonio C. Guijosa, que no deja que te pierdas y te ayuda a pasear por este entramado de temas tan esenciales para el individuo y la sociedad.
La escenografía de Mónica Teijeiro es muy atractiva nada más verla. No sabes muy bien qué es ni donde estás y creo que eso es justamente lo que se pretende. Este puede ser un lugar y otro, un mundo nuevo, tu mundo dentro de miles de años, o quizás si todo sigue así tu mundo en muy poco tiempo, no sé a mi cualquiera de ellas me parece muy sugerente.
La iluminación de Daniel Checa, acompaña, acota y te apoya a crear ese lugar que cada uno puede imaginar.
Los actores navegan por esta complicada función con mucha soltura, interpretando muchos códigos distintos y cambiando su piel en pocos segundos para llevarte a otro lugar. Se nota el profundo trabajo de dirección y de actores para que todo esos códigos estén muy definidos.
Quiero resaltar el complicado trabajo de Memé Tabares, interpretando a una mujer de lengua árabe (no quiere desvelar más).
El que quiera disfrutar de una obra política, satírica, absurda y dramática tiene una butaca esperándole en: Contra la democracia.
CONTRA LA DEMOCRACIA
Autor y traductor: Esteve Soler
Dirección: Antonio C. Guijosa
Intérpretes: Reparto – Memé Tabares, Gabriel Moreno, Marina Recio y José Vicente Moirón
Diseño de escenografía: Mónica Teijeiro
Diseño de vestuario: Rafael Garrigós
Selección musical: Antonio C. Guijosa
Diseño de iluminación: Daniel Checa
Maquillaje: Pepa Casado
Realización de escenografía: Scnik y Pinto's Escénica de acción
Realización de vestuario: Luisi Penco y Laly Moreno
Ambientación de vestuario: María Calderón
Complementos de "vestuario araña": En la Chácena
Técnico de iluminación: Javier Mata
Técnico de sonido: Ismael Becerra
Maquinista: Iván Avellano
Fotografía: Vicente S. Román
Realización de vídeo: Antonio Gil Aparicio, Emblema Films y Zagal Producciones
Diseño gráfico y cartel: Diego Pérez Aragüete
Ilustración de cartel: Bárbara Sánchez Portillo
Traductora de árabe: Souad Sani Hdidi
Dirección de producción: José V. Moirón y Gabriel Moreno
Ayudante de producción: Eduardo Bravo
Comunicación: María Díaz
Community manager: Pepa Marteles
Producción: Teatro del Noctámbulo
Distribución: Mara Bonilla
TEATRO GALILEO. MADRID