"Yo conocí un hombre que barría su tejado y limpiaba claraboyas y barandas solamente por galantería con el cielo" (Federico García Lorca).
El blanco del vestido de novia como humo de un recuerdo saliendo del cajón casi olvidado de Federico. El chal bordado de emociones y sus ojos el cielo de Granada. Sus labios pronunciando un silencio plateado que nos azota, eco de farsas, comedias, tragedias y dramas.
El corazón comienza a temblar, asustado, con miedo a escuchar esas palabras perfectamente encadenadas, contando rumores de viejas noches por los balcones cubiertos de mantos bordados de flores.
Ella se fija en tu alma y te invita a embriagarte de su complicidad con los versos, como esas poesías que uno lee y relee con adoración.
Ya lo dijo Leonard Cohen: "La poesía es solamente la prueba de que hay vida. Si tu vida se esta quemando bien, la poesía no es más que la ceniza".
Y en este montaje la ceniza esta en el aire, suspendida, como la neblina perfecta para que te adentres dentro del universo de Lorca.
Así comienza el viaje de LOS CAMINOS DE FEDERICO.
Óscar Arroyo me dijo: "Yolanda, tenemos que ver esto", quizá porque sabe que me encanta la poesía, pero debo confesar (no me juzguéis por ello) que no sabía muy bien lo que iba a ver.
Llegué y me senté, preparé mi libretita que siempre llevo para apuntar frases, imágenes, cosas que me ayuden después a escribir… ¡soberana estupidez! pensé al verla en el escenario y disimuladamente la dejé en el bolso.
Flor no me dejó respirar ni un segundo. Lorca esta fijado en cada uno de los poros de su piel y ella suda esas bellas palabras empapándote, recitando con una verdad que araña suave y dolorosamente.
Ella, cual camaleón argentino, se transforma con la escenografía estimulando tu imaginación y no deja de generar imágenes que te suben, bajan, aceleran, frenan… creando curvas infinitas y rincones oscuros iluminados por pequeñas bombillas con forma de abanicos de colores.
Los golpes mordaces de un cajón y el sonido afilado de un cuenco tibetano son los instrumentos utilizados para crear silencios desgarradores y ella… canta… y ella… recita.
Magnética, seductora y con una sensibilidad que sobrecoge, te "engaña" con su voz dulce y el mar mediterráneo en sus pupilas para cogerte y no soltarte hasta el final.
Señor@s no pueden perderse esta maravilla. He dicho.
Flor Saraví
Me regaló unos versos de su último monólogo y yo, casi hundiéndome en mi asiento, no puedo más que sentirme afortunada de que los compartiera conmigo.
Salgo emocionada y ella está allí saludando al público, al verme viene a abrazarme como si nos conociéramos desde hace tiempo y un escalofrío de alivio me recorre la espalda.
Ella me abraza como si se hiciera responsable de lo que acaba de "hacerme" y yo me agarro a ella, fuerte, sollozando como una niña pequeña, intentando trasmitirle todo lo que me ha hecho vivir en 75 minutos… pero no puedo más que llorar hasta calmarme…
Nos tomamos un vino y me confiesa que podría hacer esta obra durante años y años, y tengo la sensación de que tenía una necesidad casi física de interpretar a Lorca, algo que me conmueve y hace que entienda su entrega con el montaje, cuando las cosas las haces amando el texto tanto no puede salir mal nunca.
Me presenta a Samuel, el director, y él me cuenta que fue difícil porque Flor se quedó embarazada y entonces el proceso se alargó, aunque ahora agradece este hecho que permitió que ella posara el texto de una forma muy natural.
Gracias FLOR SARAVÍ. Gracias por regalarme esta experiencia emocional que nunca olvidaré.
____________________
El público opina
"La escenificación de un sentimiento". @ocantonio99
“Gracias por el maravilloso viaje entre el amor y la muerte". @MariaJolriarte
"Qué mejor regalo para una hija que ama la poesía" @dearribas12
"Impresionante actriz que pone los bellos de punta y te emociona". @Sevi1982g
____________________
Últimas funciones: sábado 17, 20:00 h y domingo 18, 13:00 h.
LOS CAMINOS DE FEDERICO
Autor: Federico García Lorca
Dramaturgia: Lluis Pascual
Dirección: Samuel Blanco Intérprete: Flor Saraví Escenografía: Mili Paredes y Leo Tortul Vestuario: Tatiana de Sarabia Diseño, fotografía e imagen: David Ruiz
Producción ejecutiva: Luján Ilario
Producción: Picaporte Producciones
EL UMBRAL DE PRIMAVERA. MADRID