top of page
  • Foto del escritorRedacción

Miedo al dedo acusador



Pantone 361

¿Estamos realmente preparados para que la vida nos sorprenda sin pedirnos permiso?

¿Hasta qué punto dejamos margen a la transigencia cuando se trata de nosotros mismos?

Estas y otras cuestiones nos sorprenderán entre carcajada y carcajada mientras disfrutamos de la divertida obra Pantone 361. Una entretenida comedia que nos habla de cosas muy serias. Un texto original y un buen trabajo actoral. Cabe destacar la interpretación de Inés Sánchez. Magnífica, fresca y llena de vida. Huracán de creación de personajes, en cada uno de ellos.

Pantone 361 nos habla de lo fácil que resulta apoyar la lucha a favor de la integración y aceptación del diferente, cuando nos es ajena; reivindicar los derechos de las minorías desfavorecidas, e incluso denunciar situaciones de acoso o rechazo social.

Pero, ¿y si un buen día nos encontramos con esta situación entre nuestros propios brazos? Entonces, es muy posible que esta diferenciación nos parezca abominablemente inaceptable. Jugaremos al escondite, con nuestra realidad y con las palabras. Buscaremos respuestas a preguntas que ni existen. Lo que en otros aceptamos como diferente, lo tacharemos de anómalo y raro, tan sólo por pertenecernos; tan sólo por el miedo al dedo acusador, ese que nosotros mismo siempre hubiésemos condenado.

Esta es la historia de Carlos y Claudia. Una desternillante situación desde el absurdo, para mostrarnos la cara más cómica de la naturaleza humana. Una divertida manera de terminar la semana, entre risas y buen teatro.

PANTONE 361

Dramaturgia y dirección: María Gómez-Comino Mata

Intérpretes: Nando Jiménez, Inés Sánchez, Miguel Valentín y Aida Villar Compañia: Teatro Kumato

OFF DE LA LATINA. MADRID

8 visualizaciones
bottom of page