Parece complicado, y contraproducente, tratar de valorar El descanso de Caronte como si se tratase de una obra convencional. A pesar de tratarse de un autodenominado "Acto Íntimo" marca de lo que Santi Senso ha estado haciendo ya por varios años, al tratarse de una "experiencia escénica", inevitablemente te vienen a la cabeza conceptos habituales como el sentido del ritmo, lo climático, la puesta en escena, la dramaturgia…
Pero lo mejor, a la hora de ver este u otro espectáculo de Santi Senso, es tratar de abstraerse de todo esto, y disfrutar de aquello a lo que se asiste. Cuenta Senso que una espectadora de un espectáculo anterior, le dijo que no sabía si la obra en cuestión le había gustado o no, pero que se alegraba de haber asistido. Y allí es donde se encuentra la mayor virtud, la mayor verdad, y lo más especial que ofrece Santi Senso con sus creaciones: en la comunicación íntima con su público. Esto da lugar a hermosas situaciones en su mayoría, por la vulnerabilidad y el mimo que surge entre espectador y artista una vez la cuarta pared se ha hecho añicos, momento que ocurre nada más entrar a la sala. Es lo más lúdico y sencillo aquello que acaba por emocionar. Y en sus obras es tan importante mirar lo que ocurre en la escena como lo que ocurre en los ojos de quienes asisten.
En el caso de El descanso de Caronte, Senso se une de nuevo al dramaturgo José Jesús Serrano y a la música de Cary Rosa Varona colaboradores también en su anterior Desnudando a los clásicos, y manteniendo la poética del primero y los hermosos sonidos vocales e instrumentales de la segunda, Santi Senso establece el pulso con el público sobre si merecería la pena ceder su remo y su barca (es Caronte a quien se invoca) de aquí a la eternidad. La muerte es pues el tema de la pieza, pero es ésta un juego más lúdico que telúrico, que no obstante, sabe encontrar el equilibrio entre lo uno y lo otro. Los textos guardan interesantes figuras poéticas y retóricas, pero nunca ahogan la intención juguetona de su protagonista. La música de Cary Rosa Varona ilumina la oscuridad de la propuesta. Y un nuevo aliado en el universo escénico de Senso, el vestuarista Fede Pouso, le da una pincelada estética a la propuesta tan sencilla como magistral: su elección de materiales, de colores, de construcción de los complejos vestuarios, evoca con firmeza a Caronte, la laguna estigia y la abstracción imaginaria de ese barquero desolado.
El concepto de acto íntimo es por necesidad un teatro vivo y voluble, dependiente absoluto del momento privado de sus protagonistas y de los espectadores que a él asistan. La función que yo vi fue reposada y tranquila, de atención mayúscula y sutiles reacciones emocionales. No estaba Cerbero por allí para ladrar e infundir miedo en los que íbamos en la barca. En su lugar, había una hermosa energía común, y sobre todo un honesto cariño de Senso hacia su público.
EL DESCANSO DE CARONTE Autor: José Jesús Serrano
Dirección: Santi Senso
Intérpretes: Cary Rosa Varona y Santi Senso
Vestuarista: Fede Pouso
Foto del cartel: Almudena Cadalso
Maquillaje: Sofía Baelo
Atrezzo: Juan Manuel Pérez Vinagre – Terracota Mérida
Fabricación del remo: Santiago Senso Muñoz
Vídeo promocional: Mirna Kuljis y Reyes Caballero
Jefa de prensa: Esther Sererols
Compañía Actos Íntimos
TEATRO DEL ARTE. MADRID