Convocada por la Universidad de Granada y el Ayuntamiento de Albolote, y organizada por Karma Teatro, se ha celebrado entre el 24 y el 26 de noviembre de 2022 la novena edición del Seminario Internacional de Estudios Teatrales, con programación en La Madraza granadina y en el Centro Fernando de los Ríos de la localidad metropolitana. El objeto de estudio y la razón del evento resultaron el conocimiento, el análisis y la profundización en las dramaturgias de Fernando Arrabal y José Moreno Arenas.
Se trata de dos autores rebeldes, tanto en temáticas como en formas expresivas, que se oponen y enfrentan a lo convencional, a lo establecido y a lo aburguesado. Para Arrabal, la confusión pánica (del dios Pan), el absurdo, el erotismo y la crueldad resultan ingredientes esenciales en el momento de entender y desarrollar cualquier actividad creadora, fundamentales en su concreción teatral con títulos como Pic-Nic, El triciclo, Fando y Lis, El cementerio de automóviles, El arquitecto y el emperador de Asiria, Inquisición, La travesía del imperio, Carta de amor, Dalí versus Picasso y Pingüinas, entre otros. Moreno Arenas, por su parte, hace décadas que nos agita con su teatro indigesto: surrealista, iconoclasta, irónico y siempre sorprendente, como sucede, por citar algunos ejemplos, en ¿…Y si nos dicen que nos vayamos, vamos todos y nos vamos?, Te puedes quedar con el cambio, muñeca y Te vas a ver negro (piezas extensas), El atraco, El accidente, La tentación, El aparcamiento, La paloma, La playa o La hipoteca —entre sus obras breves— y su teatro mínimo.
Dos dramaturgias diferentes y, al tiempo, afines, llenas de hallazgos escénicos, de planteamientos, de cuestionamientos y beligerancias temáticos, plagados de guiños, de matices, de giros… Y, sobre todo, de humor. Un humor brutal, ajeno a toda corrección política imperante, que nos divierte al tiempo que nos impulsa a la reflexión.
El seminario abordó la obra de ambos autores desde múltiples y diversas perspectivas, a través de las intervenciones que se sucedieron en los diversos paneles que lo conformaron. Estudiosos e investigadores de primer orden comentaron y debatieron sobre diferentes aspectos del teatro y su trayectoria en ambos dramaturgos.
La conferencia inaugural, a cargo de Adelardo Méndez, se ocupó de la producción de los autores estudiados en lo que lleva transcurrido el siglo XXI.
Le siguió una sesión dedicada a Moreno Arenas, en la cual intervinieron Rafael Ruiz Pleguezuelos (sobre el teatro mínimo), José Manuel Motos (quien se aproximó a distintas obras, como El aparcamiento, El currículum o las “pulgas dramáticas”) y Emilio Ballesteros (el caos en Moreno Arenas). La jornada la cerró el Grupo de Teatro del Ilustre Colegio de Abogados de Granada que ofreció el montaje de ¿…Y si nos dicen que nos vayamos, vamos todos y nos vamos?, de José Moreno Arenas y con dirección de José Manuel Motos.
El segundo día comenzó con la visita a la casa de García Lorca en Valderrubio, y ya en sesión de tarde se desarrolló la sesión dedicada a Fernando Arrabal, con las propuestas de Pollux Hernúñez (una aproximación a la estética singular de Arrabal), Raúl Herrero (acerca de la edición y colaboración con el dramaturgo y artista melillense), César Oliva (a través de vídeo-conferencia compartió experiencias propias con Arrabal) y Antonio Muñoz Ballesta (visión filosófica de la obra y la figura del creador estudiado). Y, como no podía ser de otra manera, la actividad se completó con las imprescindibles intervenciones de Fernando Arrabal y José Moreno Arenas, los autores estudiados. Este comentó su atracción hacia el teatro desde su adolescencia, la tendencia hacia determinado tipo de dramaturgia y su devenir hasta el presente. Por su parte, Fernando Arrabal, tras la apariencia de un coloquio con los asistentes, expuso sus ideas relativas a Hesíodo, Cervantes y Pirandello (Topor quedó en el tintero) y cómo le han fecundado e influido.
La tercera y última jornada arrancó con la continuación del panel sobre Moreno Arenas, con José Luis González Subías y María Jesús Orozco Vera, cuyas intervenciones giraron en torno al caos en la dramaturgia indigesta (ordenado y organizado según aquel, mientras para ella resulta motor y herramienta del proceso creativo). Siguieron tres intervenciones centradas en ambos autores, a cargo de Miguel Nieto Nuño (desde el Arrabal más pánico al Moreno Arenas de Federico, en carne viva), Francisco Vicente—con la complicidad ausente de Francisco Linares— (“Caos y revelación en el teatro de Arrabal y Moreno Arenas”) y Francisco Morales Lomas (acerca de la vanguardia y la transgresión en las obras de los respectivos dramaturgos):
En sesión vespertina, Francisco Gutiérrez Carbajo, en la conferencia de clausura, planteó la necesidad de redefinir términos y conceptos a la hora de afrontar el teatro de Fernando Arrabal y Moreno Arenas.
Para concluir el seminario, asistimos al montaje de El triciclo, de Fernando Arrabal, a cargo de la Escuela Municipal de Teatro “Ricardo Iniesta” de Úbeda, dirigido por Nati Villar.
En síntesis, un acontecimiento rico, plural, interesante, académico, a la par que lúdico, profundo y ameno, riguroso y divertido a la vez, y excepcional, tanto por la importancia de los autores como por la calidad de los ponentes y sus intervenciones.
Adelardo Méndez Moya
Dramaturgo y analista